LOS GRIEGOS DE LA MAGNA GRECIA
En el desarrollo de la primitiva Italia, los griegos que colonizaron el sur de Italia así como los etruscos al norte de Roma, desempeñaron un papel preponderante y fundamental en el desarrollo de toda la zona y por tanto, de Roma. Estas dos culturas fueron las transmisoras de la muy superior cultura oriental del Mediterráneo.
Debido a que las tierras de Grecia no eran fértiles, ésta no podía abastecer a todos los habitantes y el problema demográfico motivó que los antiguos griegos tuvieran que emigrar a otras zonas donde poder enviar los excedentes de población. Los primeros que emigraron hacia occidente fueron los calcidios y crearon sus primeras colonias en tierras italianas, en un islote llamado Pithecusae (la isla de Ischia) y poco después Cumas en la bahía de Nápoles, allá por el 770 a.c. con el propósito de acercarse lo máximo posible a la zona de producción de metales en el mar Tirreno que dominaban los etruscos. El ejemplo colonizador de Calcis fue seguido por otras ciudades griegas y en poco más de medio siglo, la zona sur de la bota italiana pasó a llamarse la Magna Grecia, con asentamientos importantes tanto en la península como en la isla de Sicilia gracias al tráfico comercial entre Grecia e Italia, unido al potencial agrario de esas zonas.
Estas nuevas ciudades se desarrollaron con las mismas fórmulas político-sociales y el mismo tipo de cultura y técnica de sus ciudades-madre como Siracusa en Sicilia, Tarento, Crotona, Síbaris (ver comentario abajo) , Cumas, Neápolis....
La aportación de estas ciudades griegas al sur del Lacio (Roma acababa de comenzar su periplo como pueblo si damos como buena la fecha que Tito Livio da 753 a.u.c. de su fundación) fue importantísima para el desarrollo de Roma puesto que geográficamente estaba situada entre las dos culturas emergentes en la zona, los griegos y los etruscos por lo que no es difícil pronosticar que el comercio entre éstos comenzó a dar "vida" al Lacio. Por los restos arqueológicos griegos encontrados en Roma, la huella que estas ciudades de la Magna Grecia dejaron fue muy importante. La concepción de la polis griega, el cultivo de la vid y el olivo y la religión y el arte alcanzó a la Italia primitiva y Roma aprendió de ellas.
Crotona y Síbaris:
La palabra "sibarita" según nuestro diccionario es la de una persona o grupo urbano de gustos refinados. La etimología de este término deriva de la ciudad italiana-griega de Síbaris, que era famosa por la extremada exquisitez de su gente.
Se dice que una vez un habitante de Síbaris le dijo a otro griego que no había podido dormir porque un pétalo de rosa, de los miles que rellenaban su colchón, estaba doblado. El fin de esta ciudad cuentan que también fue provocada por el sibaritismo de sus jefes militares: los ciudadanos de Síbaris presumían de que sus caballos de guerra bailaban al son de la música. Cuenta la leyenda que cuando entraron en guerra con Crotona, esta contrató músicos que en plena batalla hicieron tocar sus instrumentos, por lo que los caballos de los sibaritas se pusieron a bailar y fueron fácil presa de sus enemigos, que destruyeron completamente la ciudad.