RELIGION ROMANA
Catón: "De agricultura" CxxxIV:
Antes de la cosecha conviene que se siga este ritual sobre la celebración del sacrificio de una cerda, a la que hay que inmolar antes del comienzo de la siega.
Antes de empezar, se inmola una cerda, trigo, grano, cebada y la semilla sobrante en honor de Ceres. Se mezclan vino e incienso en honor de Jano, Júpiter y Juno antes de inmolar la cerda. En honor de Jano se presenta la ofrenda con estas palabras:
"¡Oh, Padre Jano! al presentarte estas ofrendas te ruego con oraciones perfectas, que seas benévolo y propicio para mí y para mis hijos, para mi casa y para mi familia".
La ofrenda a Júpiter ha de ser presentada e inmolada diciendo:
"¡Oh, Júpiter! Al presentarte esta libación, te ruego con plegarias perfectas, que seas benévolo y propicio para mí y para mis hijos, para mi casa y mi familia; glorificado seas con esta libación".
Después, cuando se le presente a Jano el vino, se dirá:
"¡Oh, Padre Jano, como te he rogado bien al presentarte la ofrenda, sé glorificado de la misma manera y acepta este vino ritual".
A continuación a Júpiter, de esta manera:
"¡Oh, Júpiter! sé glorificado por esta libación y también por este vino ritual".
Sólo después de haber realizado todos estos ritos es cuando hay que sacrificar la cerda.
Una vez que se le hayan extraído las entrañas, preséntale a Jano la ofrenda de la misma manera y con los mismos ritos que antes. Lo mismo harás con la libación en honor de Júpiter. Da vino a Jano y a Júpiter como has hecho antes al ofrecer la ofrenda y la libación. Por último, ofrece a Ceres las entrañas y el vino.